Fermentos lácticos
Síntesis
| Nombre común | Fermentos lácticos |
| Otros nombres | Bactérias lácticas, probióticos |
| Beneficios principales | Confort intestinal | Bienestar general | Defensas del organismo |
Introducción
Los fermentos lácticos son parte de la familia más grande de probióticos. Muy estudiado, estos son microorganismos que son conocidos por sus múltiples beneficios en el cuerpo. Los fermentos lácticos, y en particular las bacterias del ácido láctico, entran en la estructura microbiana. Estos son conjuntos de microorganismos presentes en el cuerpo y cuyo equilibrio es esencial para muchas funciones.
Por ejemplo, se sabe que el equilibrio de la microbiota intestinal desempeña un papel clave en la digestión y la defensa del organismo. De hecho, un tratamiento con fermentos lácticos puede, en particular, contribuir a favorecer el tránsito intestinal y prevenir ciertas afecciones.
Origen, hábitat y cultura
Origen e historia de los fermentos lácticos
Los fermentos lácticos son una gran familia de microorganismos, entre los que se encuentran las bacterias lácticas y las levaduras lácticas. Como su nombre indica, estos microorganismos participan en la fermentación del ácido láctico.
También conocido como lacto-fermentación, este proceso es conocido desde hace muchos años. Sin embargo, el descubrimiento de los fermentos lácticos propiamente dicho se remonta al siglo XIX.
Fue nada menos que el célebre físico, biólogo y químico francés Louis Pasteur quien permitió comprender mejor el funcionamiento de la fermentación láctica y destacó el papel que desempeñan las bacterias lácticas.
Funciones de los fermentos lácticos
En esta fase, debemos distinguir entre las funciones de los fermentos lácticos en el proceso de fermentación láctica y sus acciones dentro del organismo.
La fermentación del ácido láctico es un proceso muy utilizado en la industria alimentaria. Se utiliza, en particular, para la producción de productos lácteos fermentados (yogures, quesos, leche cuajada, etc.), verduras fermentadas (pepinillos, etc.) y otros productos fermentados como los embutidos. En este proceso de fermentación, los fermentos lácticos son capaces de transformar los azúcares, como la lactosa, la fructosa o la sacarosa, en ácido láctico. Este compuesto tiene varias acciones. Por un lado, contribuye a las propiedades organolépticas de los productos. Por otro lado, actúa como conservante natural al limitar el desarrollo de patógenos.
Dentro del organismo, los fermentos lácticos están presentes y se desarrollan a nivel de la microbiota. Esta microbiota está presente en diferentes niveles del organismo, especialmente en el intestino, la boca, la piel, los pulmones y el tracto genital. El equilibrio de esta microbiota es crucial. Un desequilibrio no sólo favorece el desarrollo de patógenos, sino que también puede repercutir en otras funciones.
Los estudios demuestran que el equilibrio de la microbiota influye en las funciones digestivas, inmunitarias, neurológicas y metabólicas. Esto significa que los fermentos lácticos son de gran interés para la comunidad científica. También se consideran probióticos, microorganismos que son beneficiosos para el organismo cuando se ingieren en cantidades suficientes.
Apariencia, composición y formato
Existen diferentes fermentos lácticos, pero los principales son las bacterias lácticas. No son visibles a simple vista. Mediante la microscopía, los científicos las clasifican como bacterias Gram positivas (Gram+). Esto significa que tienen una pared muy gruesa.
Originalmente, las bacterias lácticas se recogían de los productos fermentados y luego se inoculaban para utilizarlas en otras fermentaciones. Sin embargo, este proceso ya no es suficiente para cubrir la creciente demanda de las industrias alimentaria y nutracéutica. Gracias a los avances científicos, se han podido aislar cepas de fermentos lácticos y ponerlas en cultivo para su producción a mayor escala.
Existen varias cepas de bacterias lácticas, como Lactobacillus, Lactococcus, Aerococcus, Alloiococcus, Enterococcus y Streptococcus. A pesar de algunos debates, las bifidobacterias (Bifidobacterium) también suelen clasificarse como bacterias lácticas.
De hecho, es posible distinguir tres categorías de fermentos lácticos
- fermentos puros, que consisten en una sola cepa;
- fermentos mixtos, que consisten en diferentes cepas cuya composición está parcialmente determinada
- fermentos mixtos seleccionados, que consisten en varias cepas bien definidas.
Los fermentos puros y los fermentos mixtos seleccionados se utilizan, entre otras cosas, para la preparación de complementos alimenticios. Estos complementos probióticos pueden ofrecerse en diferentes formatos, como cápsulas y ampollas. A veces, los probióticos pueden combinarse con los prebióticos. Son sustancias que favorecen el desarrollo de los probióticos en el organismo.
Propiedades y efectos investigados
Los beneficios de los fermentos lácticos son de gran interés para la comunidad científica. Investigadores de todo el mundo están trabajando para evaluar su potencial terapéutico completo. Lejos de ser exhaustivos, los párrafos a continuación ofrecen una visión general de los principales beneficios conocidos de los fermentos lácticos. Además, se debe tener en cuenta que cada fermento láctico puede tener sus propias propiedades y, por lo tanto, tener diferentes beneficios dentro del cuerpo.
Equilibrio de la flora intestinal:
Los primeros descubrimientos sobre los fermentos lácticos se referían a la esfera intestinal. Los investigadores han demostrado que la complementación con probióticos puede ayudar a mantener el equilibrio de la flora intestinal y, por lo tanto, promover el tránsito intestinal. Se han observado efectos positivos para combatir los trastornos digestivos, como hinchazón, flatulencia, estreñimiento y diarrea.
Enfermedades crónicas inflamatorias del intestino:
Los investigadores también han demostrado que la complementación con bacterias del ácido láctico puede ser de interés en la lucha contra la enfermedad inflamatoria intestinal. Caracterizadas por la inflamación del revestimiento del tracto digestivo, estas afecciones no tienen actualmente ningún tratamiento curativo. Muy estudiado, el tratamiento con los fermentos lácticos ofrece actualmente vías prometedoras de investigación.
Bienestar general y defensa del organismo:
Muchos investigadores están convencidos de que el equilibrio de la microbiota dentro del cuerpo es esencial para muchas funciones. Los estudios ya han demostrado efectos en las funciones digestivas, neurológicas, inmunes y metabólicas. En otras palabras, la complementación con bacterias del ácido láctico puede ser de considerable interés para el bienestar general y la defensa del cuerpo.
Hasta la fecha, los investigadores han proporcionado los primeros resultados positivos para fortalecer el sistema inmunológico, luchar contra ciertos trastornos metabólicos como la hiperlipemia, prevenir ciertos trastornos cardiovasculares o contribuir al tratamiento de la diabetes. Algunas cepas de probióticos también han revelado efectos adelgazantes y acción ansiolítica. Actualmente se están realizando muchos estudios para confirmar y evaluar el alcance de los beneficios de las bacterias del ácido láctico.
Dosificación
Los estudios actuales aún no han definido una dosis recomendada para los fermentos lácticos. La dosis también dependería de muchos parámetros, incluida la cepa de probióticos y los efectos deseados. En la actualidad, muchos complementos se ofrecen con una dosis de entre 4 y 8 mil millones de probióticos por día. En caso de duda, es recomendable acudir a un profesional de la salud.
Contraindicaciones, peligros y efectos secundarios
Contraindicaciones de los fermentos lácticos: los fermentos lácticos son microorganismos presentes en grandes cantidades dentro del organismo. Son muy bien tolerados y tienen muchos beneficios. Sin embargo, como medida de precaución, no se recomienda la complementación con probióticos para mujeres embarazadas, mujeres lactantes, niños y personas inmunocomprometidas. En caso de duda, se recomienda pedir consejo médico.
Efectos secundarios de los fermentos lácticos: Hasta la fecha, no se han observado efectos secundarios importantes cuando se toman complementos de fermentos lácticos.
Asociaciones sugeridas
Confort intestinal: Prebióticos
Prevención de problemas digestivos: Alcaravea, Fenogreco.
Inmunidad: Aceite de hígado de bacalao, Semillas de pomelo
Información complementaria
Se han realizado múltiples estudios sobre los fermentos lácticos. En cualquier momento, los nuevos resultados pueden contradecir o complementar esta información. En caso de duda, es recomendable acudir a un profesional de la salud.
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